miércoles, 21 de marzo de 2012

andróginxs (que me ponen) II

Tilda Swinton en We need to talk about Kevin

David Chiang

David Chiang

Antony Hegarty

implantación de las identidades perversas

"La sodomía  la de los antiguos derechos civil y canónico— era un tipo de actos prohibidos; el autor no era más que su sujeto jurídico. El homosexual del siglo XIX ha llegado a ser un personaje: un pasado, una historia y una infancia, un carácter, una forma de vida; asimismo una morfología, con una anatomía indiscreta y quizás misteriosa fisiología. Nada de lo que él es in toto escapa a su sexualidad. Está presente en todo su ser: subyacente en todas sus conductas puesto que constituye su principio insidioso e indefinidamente activo; inscrita si pudor en su rostro y su cuerpo porque consiste en su secreto que siempre se traiciona. Le es consustancial, menos como un pecado en materia de costumbres que como una naturaleza singular. No hay que olvidar que la categoría psicológica, psiqiátrica, médica, de la homosexualidad se constituyó el día en que se la caracterizó —el famoso articulo de Westphal sobre las 'sensaciones sexuales contrarias' (1870) puede valer con fecha de nacimiento— no tanto por un tipo de relaciones sexuales como por cierta cualidad de la sensibilidad sexual, determinada manera de invertir en sí mismo lo masculino y lo femenino. La homosexualidad apareció como una de las figuras de la sexualidad cuando fue rebajada de la práctica de la sodomía a una suerte de androginia interior, de hermafroditismo de alma. El sodomita era un relapso, el homosexual es ahora una especie."

Michel Foucault, Historia de la sexualidad.

The swimming pool by Michaël Borremans