El verdadero mándala es siempre una imagen interior que se construye paulatinamente mediante la imaginación (activa) y cuando sobreviene una perturbación del equilibrio psíquico o cuando no se puede encontrar un pensamiento y se lo busca porque no está contenido en la doctrina sagrada.

Es esencial conocer esta alta valoración del símbolo, pues la importancia asignada concuerda con el significado central de los símbolos de los mándalas individuales, a los cuales les son propias esta cualidades de naturaleza, por así decirlo, "metafísica", pues si no nos engañan todas las señales, esas cualidades significan un centro psíquico de la personalidad que no es idéntica al yo.
C. G. Jung, Psicología y alquimia
1 comentario:
Cambio de registro, una interesante forma para confrontar y valorar.
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